Santo Domingo.- Dos maletas con seis paquetes de cocaína fueron ocupadas anoche en el Aeropuerto de Punta Cana antes de ser embarcadas a Bélgica, pero el propietario de los equipajes, un ciudadano de ese país, no se presentó al área de chequeo al percatarse de que las autoridades detectaron el narcótico.
Asimismo, un álbum fotográfico relleno de droga fue interceptado por la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD) en el Instituto Postal Dominicano (IMPOSDOM) antes de ser enviado Canadá por una persona residente en Santiago. El remitente se identifica como Ricardo Hernández y quien lo recibiría es el nombrado Jacques Laurent, domiciliado en Québec.
La DNCD informó que los equipajes retenidos en Punta Cana estaban registrados a nombre de Vicenio Onnembo, quien pretendía tomar el vuelo TB-304, con destino a Bruselas, lo que no hizo al ser descubiertos los paquetes de droga, con un peso provisional de 6 kilos 340 gramos.
El portavoz de la DNCD, Roberto Lebrón, dijo que las maletas de Onnembo estaban etiquetadas con los números 798241 y 798300, las que fueron revisadas por efectivos del organismo y del Cuerpo Especializado de Seguridad Aeroportuaria (CESA) al notar que en ellas habían otras cosas diferentes a prendas de vestir.
La droga fue trasladada de inmediato a la sede central de la DNCD, en la capital, para luego remitirlas al laboratorio para el análisis correspondiente, mientras la DNCD persigue al detenido para arrestarlo y ponerlo a disposición del Ministerio Público pata que lo someta a la justicia, agregó Lebrón.
Y sobre el álbum fotográfico con la droga, el vocero antidrogas dijo que el supuesto remitente alega residir en el Edificio 32, Apartamento 302, en la calle Las Carreras, en Santiago, dato que las autoridades tratan de establecer, mientras Laurent está domiciliado
En la 102 St. Jean Baptiste, local 57, Chateauguay, Québec, Canadá.
Se trata, dice el informe, de un álbum de 18 páginas llenas de fotografías, pero previamente fue perforado para colocarle cerca de 40 gramos de un polvo blanco con las mismas características de la cocaína. Ya se han descubierto maniobras similares en enciclopedias, libros de inglés y hasta en la Sagrada Biblia.
Agentes antidrogas entraron en contacto con miembros de la Real Policía Montada de Canadá para determinar si en la citada dirección reside el destinatario de la sustancia prohibida para que allí se actúe en consecuencia, mientras en el país se procedía a lo mismo en torno al remitente.
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