Para muchos, la relación se vuelve un dolor de cabeza, una inevitable cruz a cuesta que a la larga va destrozando la esperanza y los sueños que una vez se crearon juntos. Existen muchos motivos por los que una pareja puede caer en crisis, venenos que destruyen el más sólido amor.Chequeen:
La rutina.
Los celos enfermizos.
El creer que tu pareja es de tu propiedad, sin importar sus sentimientos y necesidades.
La crítica constante y culpabilización
La falta de empatía y compasión hacia el otro.
La falta de comunicación.
La infidelidad
No invertir tiempo en tu pareja.
El orgullo, no saber pedir perdón.
Las mentiras.
Mala relación con la familia de tu pareja.
No saber escuchar las necesidades del otro.
En el amor sano no cabe el tener que resignarse a vivir el martirio de la insatisfacción. Si tienes que vivir amargado, sobresaturado, anulándote para complacer al otro, estás con la persona equivocada.
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